Sunday, May 23, 2021

Los Cuatro Pilares de la Educación en Tiempos de COVID-19

 

Los Cuatro Pilares de la Educación en Tiempos de COVID-19

Por Dr. Gilberto Hernández Quirós

gilberto.hernandez.quiros@una.cr

UNA Nicoya, Sede Chorotega

 

 


Educación es una palabra tan poderosa que podría ser sinónimo vinculante e incluso llevarnos hacia tendencias de mejoramiento continuo, aprendizaje de por vida y esfuerzos exitosos desde las primeras etapas de nuestras vidas.  Todas las personas deseamos aprender, saber y tener acceso a los aportes intelectuales y pragmáticos además de las perspectivas de la más diversa índole.  Los más importante es que todas las personas deseamos estar mejor informados y poseer el conocimiento para expresar nuestras opiniones basadas en fundamentos y datos, así como compartir el conocimiento, hacer sugerencias y tomar decisiones con el objetivo de mejorar nuestra calidad de vida y la de nuestras familias, amigos, país y las comunidades en donde vivimos.  La educación también es sinónimo de optimismo, tolerancia, compasión, autocontrol, paciencia y un deseo ardiente por avanzar hacia estilos de vida más prósperos.

Sin embargo, no todas las personas tienen acceso u oportunidades para estudiar y seguir una carrera lo cual nos plantea la pregunta si la educación es para todas las personas.  La UNESCO que significa Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, presentó la producción de la declaración de “Educación para Todas y Todos” (EFA en inglés) donde se identificaron cuatro pilares como cimientos o bases de la renovación y reforma de la educación durante una reunión en 1990 en Jomtien, Tailandia entre el llamado grupo E-Nueve cuyos miembros eran (en ese momento) Bangladesh, Brasil, China, India, Indonesia, Egipto, México, Nigeria y Pakistán. 

Esos cuatro pilares son los siguientes y podrían ser efectivos en tiempos de COVID-19.

Aprender a conocer:

Los niños y niñas, adolescentes, jóvenes adultos y prácticamente todas las personas se deberían enfocar en el concepto del conocimiento básico y general para poder trabajar en áreas específicas según los cambios emergentes en la ciencia, la tecnología y las actividades socioeconómicas.  Lo anterior ha sido evidente durante el brote del coronavirus lo cual nos plantea muchos problemas tales como la ineficiencia de educación virtual o en presencialidad remota, en algunos casos, debido a la falta de dispositivos tecnológicos o la falta de conectividad.  Por lo tanto, debemos apegarnos a tres aspectos:  lo que se aprende, la manera en que podemos hacer que las personas aprendan y sepan y quién es la persona que está llevando a cabo el proceso de aprendizaje.  Existen distintas plataformas (tales como Microsoft Teams, Google Meets y Whatsapp por mencionar algunas) y dichas plataformas han afrontado el reto para estar a la altura del desafío tecnológico para mediar la educación tecnológicamente y poder continuar aprendiendo a conocer y a saber.

Aprender a hacer:

Este concepto de aprendizaje comprende las habilidades de razonamiento, la iniciativa y el perfeccionamiento de los sentidos.  Con la declaración de la emergencia global por el brote del coronavirus, el confinamiento y todas sus repercusiones, nos vimos obligados a desaprender y reaprender para hacer las cosas de formas distintas para poder sobrevivir y esperar la llegada o aplicación de la vacuna y luchar para exterminar el virus.  Por supuesto, todo lo anterior ha requerido creatividad, trabajo arduo, así como una actitud positiva para repensar las formas de hacer las cosas de forma diferente.

Aprender a convivir:

La pandemia nos ha separado con el distanciamiento social y desconfiamos de muchos, sino que de todas las demás personas.  No obstante, y como sociedad mundial que somos tuvimos que comprender que todos estábamos (o estamos) en esta situación juntos sin importar la cultura, zona geográfica o etnia.  Tuvimos que aprender a vivir juntas y juntos y protegernos para luchar contra el virus y ojalá regresar a esa normalidad que hemos estado añorando y que ahora más que nunca valoramos.

Aprender a ser:

Tenemos el potencial de actualizarnos a través de la libertad y la sabiduría para tomar decisiones con un sentido fuerte de responsabilidad a pesar de las barrenas, debilidades, y limitaciones.  En medio de la pandemia tuvimos que aprender a ser personas pacientes, cooperativas, y creativas,  centradas en sí mismas y también en lo grupal además de muchas otras formas de reinventarnos para evitar desfallecer o que se desmoronen nuestros planes debido a la pandemia.

En resumen:

Al aprender convivir (durante COVID-19 o por siempre), debemos construir una cultura de paz genuina y verdadera orientada hacia el desarrollo de la comprensión de la historia, los chistes, la moda, las tradiciones, los valores espirituales y el aprecio por nuestra interdependencia.  Al aprender a ser se nos presenta el papel que desempeña la educación en el desarrollo de todas sus dimensiones de la persona integral para lograr la integración física, intelectual, emocional y ética.    Se refiere al desarrollo general del ser humano como individuo y miembro de la sociedad.  Al aprender a conocer o saber,  debemos desarrollar nuestra concentración, la memoria, las destrezas, y la habilidad para pensar.  El papel que juegan los educadores y educadoras es actuar como entes facilitadores, catalizadores, monitores y evaluadores del aprendizaje y de sus procesos.  Podemos salir de esta situación siempre y cuando tengamos voluntad.

The Four Pillars of Education in Times of COVID-19

 

The Four Pillars of Education in Times of COVID-19

By Dr. Gilberto Hernández Quirós

gilberto.hernandez.quiros@una.cr

UNA Nicoya, Chorotega Campus



Education is such a powerful word that may be synonymous and conducive towards trends on continuous improvement, lifelong learning, and successful endeavors since the very early stages of life.  We all wish to learn, know, have access to input and insights of the most various kinds.  Most importantly, we all wish to be better informed and possess the knowledge to express factual opinions, share understanding, make suggestions and decisions ideally in views of improving one’s quality of life and that of our families, friends, country and communities in which we live.  Education is also synonymous of optimism, tolerance, compassion, self-control, patience and a burning desire to advance towards brighter walks of life.

However, not everyone has access or opportunities to study and pursue a career and this poses the question whether education is for all.   UNESCO, which stands for the United Nations  Educational, Scientific and Cultural Organization, came up with the production of a declaration of “Education for All” (EFA) where four pillars were identified as the foundations of renewal and reform of education during a meeting in 1990 in Jomtien, Thailand between the so-called E-Nine whose members are Bangladesh, Brazil, China, India, Indonesia, Egypt, Mexico, Nigeria and Pakistan. 

These four pillars are the following and my prove to be effective in times of COVID-19.

Learning to Know:

Children, adolescents, young adults and practically everyone should focus on the concept of basic and general knowledge to be able to work on specific areas in accordance with changes in science and technology and socio-economic activities.  This has been evident during the outbreak of the coronavirus which has raise many problems such as ineffective learning.  Therefore, we must adhere to three aspects:  what is learned, how we can make people know and learn, and who is doing the learning.  Several online platforms (such as Microsoft Teams, Google Meets and WhatsApp to name a few) rose to the challenge to mediate education technologically so that we would all continue learning to know.

Learning to do:

This learning concept encompasses thinking skill, initiate and honed sense.  With the declaration of the global emergency to the coronavirus outbreak, the lockdown and all its repercussions, we all had to unlearn and relearn to do things in different ways so we would be able to survive and wait for a vaccine to arrive and fight off the virus.  Of course, this required creativity, hard work and a positive attitude to rethink ways how on how to do things differently.

Learning to live together:

The pandemic made us all separate, social distance and mistrust most if not everyone.  However, as a worldwide society we all had to understand that we were all in this together regardless of culture, geography, or ethnicity.  We had to learn to live together and protect each other to do away with virus and hopefully come back to that normal that we all have been longing for and now appreciate more than ever.

Learning to be:

We have the potential to actualize ourselves through freedom and wisdom to make choices with a strong sense of responsibility despite weaknesses.  Through the pandemic, we had to learn to be patient, cooperative, creative, self-focused plus many other ways to reinvent ourselves and avoid breaking apart or have plans falling through due to the pandemic. 

In short

In learning to do, we adapt and change form skills to competence put into practice.  Those skills should enable us to rethink and reinvent the way we do things during this pandemic.  In learning to live together we should be able to create awareness and understanding with a sense appreciation, cooperation, and conflict resolution.  In learning to live together (during COVID-19 and forever more) we should build a genuine and lasting culture peace geared towards the development of understanding of history, traditions and spiritual values and appreciation of our interdependence.  In learning to be, we are presented with the role of education in developing all dimensions of the complete person to achieve physical, intellectual, emotional, and ethical integration.  It refers to the overall development of the human person as individual and as a member of the society.  In learning to know, we must develop our concentration, memory, skills, and ability to think.  The role of teachers is to act as facilitators, catalysts, monitors, and evaluators of learning.